El pasado lunes 11 de julio, CESCOS organizó un evento en la Antesala de la Cámara de Representantes de Uruguay, en el que expusieron el Presidente de la Cámara de Representantes, Ope Pasquet, Presidente de la Organización Cubanos Libres en Uruguay, Luis Estrada y los diputados Juan Martín Rodríguez y Martín Elgue. El título del evento “A un año del 11J: un grito por la democracia en Cuba”, donde se recordó lo que sucedió el día del 11 de julio de 2021 en Cuba, cuando la población salió a las calles a protestar, de forma masiva, por la falta de libertades y la deplorable situación económica.
Pedro Isern, Director Ejecutivo de CESCOS, fue el moderador del evento y el primero en tomar la palabra destacando la importancia de este día “que fue un punto de inflexión en la historia reciente de este noble país”. En Cuba no se han vivido protestas de esta magnitud desde el llamado “Maleconazo” que sucedió en agosto de 1994. A su vez, Isern se refirió a lo que sucede en otros dos países de Latinoamérica, Nicaragua y Venezuela, que siguen los pasos de lo que sucedió y sigue sucediendo en Cuba.
Por su parte Luis Estrada habló desde su experiencia y su contacto directo con los cubanos que se escapan de la isla y buscan refugio en Uruguay. “Los cubanos llevamos más de seis décadas buscando donde refugiarnos” , eso decía Estrada sobre los miles de cubanos que se escapan del régimen en busca de libertad y una mejor calidad de vida. Para Estrada el 11 de julio de 2021 representó el despertar del pueblo cubano, “lo que se vio en las calles fue un grito de libertad”.
Juan Martín Rodríguez, destacó el compromiso de Uruguay en esta lucha e instó a todos los países de Latinoamérica a apoyar al pueblo cubano, “Los Parlamentos no pueden quedarse callados cuando hay regímenes que oprimen derechos”. Para el diputado, el 11J simboliza el principio del fin “un fin que no será de un día para el otro, no será abrupto, sino que será un proceso de cambio”.
Por último, tomó la palabra Ope Pasquet, quien remarcó la singularidad del caso cubano, no sólo por su longevidad, en tanto ya son 62 años de dictadura, pero además se destaca por ser “una dictadura totalitaria que pretende controlar totalmente la existencia humana”. Con respecto a las protestas, Pasquet remarcó el papel clave que jugaron las redes sociales, que permitieron que todo el mundo observara lo que realmente estaba sucediendo dentro de la isla. Para terminar destacó la importancia de denunciar a la dictadura cubana como lo que es, un desastre político, económico y social. Y además “hay que expresar solidaridad con los cubanos que aún están luchando”.
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