#DisinfoTalks

El año 2024 se presenta como un hito significativo en la historia política contemporánea, caracterizado por un fenómeno sin precedentes: casi la mitad de la población está prevista para acudir a las urnas. Sin embargo, este evento crucial se ve influenciado por las oportunidades y desafíos derivados del impacto de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.

Las tecnologías emergentes, como las redes sociales y la inteligencia artificial, están transformando profundamente la manera en que nos informamos y nos relacionamos. Estas herramientas, que en principio son neutrales, tienen un gran potencial para mejorar la conectividad y facilitar el acceso a la información. Sin embargo, también presentan riesgos, ya que pueden ser utilizadas para propagar información falsa o manipulada.

La desinformación, aunque no es un fenómeno reciente, ahora se propaga con mayor rapidez y alcance, gracias al uso de estas tecnologías. En el contexto electoral, esto se convierte en un desafío aún mayor. La desinformación distorsiona el espacio público, genera confusión entre los votantes y, lo más grave, pone en peligro la integridad del proceso democrático. Los ciudadanos no pueden tomar decisiones informadas si están siendo bombardeados con noticias falsas.

El impacto de la desinformación en las elecciones va más allá de la simple difusión de falsedades. Su presencia socava la confianza en las instituciones, polariza a la sociedad y genera desilusión en muchos ciudadanos respecto al sistema electoral. En este escenario, el derecho de los ciudadanos a participar de manera informada y en un debate político transparente se ve amenazado. Las mentiras no sólo confunden, sino que pueden deslegitimar el voto y distorsionar los resultados electorales, afectando gravemente la legitimidad del proceso.

Desde CESCOS, presentamos «Disinfotalks», un podcast pensado para explorar y analizar las elecciones más relevantes del 2024. A lo largo de cada episodio, nos sumergimos en los aspectos más importantes de las campañas electorales, desglosando el contexto en el que se desarrollan y las dinámicas que influyen en los resultados. Nuestro enfoque no solo se limita a los procesos tradicionales de las elecciones, sino que también examinamos cómo las nuevas tecnologías, como las redes sociales y la inteligencia artificial, están transformando la manera en que los candidatos interactúan con los votantes y, a su vez, cómo estas herramientas facilitan la propagación de desinformación.

Taiwán, Venezuela, Indonesia, Estados Unidos, Pakistán y Uruguay son algunos de los países que cubrimos en el podcast, abordando cómo la desinformación y las nuevas tecnologías influyen de manera distinta en cada uno de ellos. En Taiwán, exploramos la creciente influencia extranjera, especialmente de actores como China, que buscan manipular la opinión pública a través de la desinformación. En Venezuela, analizamos el uso de estas herramientas por parte de un gobierno autoritario para controlar la narrativa y restringir la libertad de información. En Indonesia, nos centramos en el papel crucial que juegan las redes sociales, utilizadas estratégicamente por los políticos para captar votos y movilizar a los electores. En Estados Unidos, abordamos la propagación masiva de desinformación, especialmente en tiempos electorales, y su impacto en la polarización política. A través de estos estudios de caso, buscamos ofrecer una visión global de cómo la tecnología y la desinformación están redefiniendo la política en el siglo XXI.

«Disinfotalks» es el espacio para comprender cómo las elecciones están cambiando en la era digital, cómo la desinformación afecta a las campañas y qué podemos hacer para proteger la integridad de los procesos democráticos. ¡Te invitamos a escuchar el podcast!

También pueden acceder al podcast completo en nuestro canal de YouTube.