Está disponible un nuevo número del Newsletter quincenal sobre ¿qué pasa en los Estados Unidos?

Un proyecto de CESCOS

Es necesario cuestionar la ingenua creencia que sostiene que el comercio entre los países contribuye a la paz siempre, independientemente que sea entre una democracia liberal pequeña y una dictadura grande. Nos preguntamos: ¿Cuál es la relación entre paz y comercio? ¿Comerciar con dictaduras promueve la paz o, en cambio, solo las fortalece en el corto mediano plazo y ello puede, eventualmente, en el mediano-largo plazo amenazar la paz de las democracias? ¿El comercio ha promovido realmente la paz o, en cambio, ha sido la paz de posguerra, particularmente la distención posterior a la implosión soviética, lo que ha profundizado el comercio y con ello la prosperidad de democracias pero también de dictaduras? Es una pregunta crucial para la última década. Es evidente que el comercio promueve la prosperidad y que democracias prósperas potencian a ciudadanos autónomos que, razonablemente, no les interesa ir por la vida generando conflictos con otros países. Sin embargo, cuando la paz posterior a la caída del muro promovió el comercio entre democracias y dictaduras, la consecuente prosperidad de las dictaduras no fortaleció la paz porque enriqueció y empoderó principalmente a la casta política que gobernaba en esas sociedades cerradas y solo, secundariamente, enriqueció a los ciudadanos.